lunes, 11 de julio de 2011

Retales

Hace algunas semanas llegó a mí la noticia de la existencia de un libro y de una persona que me despertaron un interés por encima de lo habitual. Se trataba de Joan Antoni Melé y de su libro “Dinero y conciencia. ¿A quién sirve mi dinero?” Tanto el autor como el tema hicieron que prestara una especial atención hacia un discurso que rompía con lo acostumbrado. Un discurso en el que se mezclaban conceptos que normalmente no caminan juntos como dinero y valores (que no valor), opinión y reflexión, o violencia y falta de sentido.
Por motivos varios no me fue posible acceder al libro hasta hace un par de días y, aunque no he finalizado su lectura, quiero destacar la bondad de la obra. Sencilla, sin pretensiones, pero con mucha voluntad de generar reflexión y, sobre todo, comprensible.
Lo que sigue es un conjunto de fragmentos extraídos del libro, de lo que llevo leído de ese libro. Fragmentos de quien firma el prólogo (Álex Rovira), de quien tiene a su cargo la presentación (Esteban Barroso) o del propio autor de la obra (Joan Antoni Melé).

Si los traigo a colación es porque todas ellos me parecen oportunas.

La calidad del alma se manifiesta en la calidad de la comunicación, relaciones, acciones y objetos que emanan de esa alma. (A.R.)

La cultura, la formación, la palabra, la conciencia, en definitiva, son el único camino hacia la calidad. (A.R.)

Las personas están en el centro de toda actividad financiera o económica. En las organizaciones y empresas esta afirmación se traduce en que son también las personas el eje de su actividad. (E.B.)

Los problemas que el mundo tiene hoy planteados requieren algo más que la sabiduría del pasado. (J.A.M.)

La crisis económica está aquí, pero no es nueva: tres mil doscientos millones de personas en el mundo no viven en crisis sino en miseria absoluta. (J.A.M.)

Al colapso de la economía especulativa lo estamos llamando «crisis». (J.A.M.)

El poder del ciudadano no reside tanto en su voto, como en la dirección a la que dirija su dinero, su forma de consumir. (J.A.M.)

Hasta aquí las citas. Hasta aquí, este conjunto de retales. Opiniones de otros que bien podrían ser propias.
Habrá más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario